En la actualidad se ofertan múltiples métodos revolucionarios que prometen hacer el aprendizaje del inglés fácil y rápido.
Hello Idiomas aboga por sus profesores
en lugar de un ‘método milagroso’

«Un buen profesor
sabe transformar
un acto cotidiano en
una experiencia única»
De vez en cuando un padre o una madre me pregunta mi opinión sobre algún sistema nuevo para aprender inglés que, según ha leído, da unos resultados extraordinarios.
Como respuesta, señalo que es conveniente tener en cuenta la procedencia del texto, que casi siempre es propaganda publicitaria, lo cual por su naturaleza, nunca promete resultados mediocres. Y es que, a pesar de lo que pueda afirmar este tipo de publicidad, ningún estudio científico ha revelado la clara ventaja de un ‘método mágico’ que conduce al aprendizaje acelerado y sin esfuerzo de los idiomas.
En mi experiencia, cuando una institución alaba el gran éxito de su ‘método’, oculta la otra cara de la moneda: el papel del profesor queda restringida a el de un simple mecanismo para proporcionar el apreciado método. Tiene prohibido desviarse de la guía y desde luego no debe mostrar cualquier iniciativa propia. Hasta es muy habitual que las franquicias prefieran profesores sin experiencia y formación para que no estén ‘contaminados’ con ideas alternativas. Estos profesores reciben poca formación (sólo la suficiente para saber seguir el guía), y poca remuneración (después de todo, sólo son canalizadores del método).
Por el contrario, lo que sí confirman las investigaciones una y otra vez es la influencia positiva en la enseñanza del idioma de un buen profesor, y es por eso que soy muy partidario de los profesores y menos entusiasmado por los métodos. Hay tres características cuantificables para detectar un buen profesor – formación, experiencia y dedicación – y una más que es difícil de definir: la genialidad. Cuando recordamos a una querida profesora de nuestra etapa escolar, estamos pensando en esa genialidad, su forma particular de transformar un acto cotidiano en una experiencia única.
En Hello Idiomas apreciar la buena docencia forma parte de nuestra filosofía. Reconocemos que es imprescindible ofrecer una renumeración acorde con el perfil docente deseado. Además, el equipo directivo está formado por profesores en activo, imparten clases todos los cursos y así tiene una visión que comparten con los demás profesores. Celebramos seminarios formativos internos con regularidad, que tratan de un amplio abanico de temas. Desde cómo ayudar a los más tímidos a contribuir y participar en las clases hasta los criterios de corrección de una redacción para un examen oficial. En este respecto, animamos a los profesores a solicitar formar parte de los equipos de examinadores oficiales de las pruebas orales de Cambridge, igual que promocionamos la asistencia en conferencias profesionales y en cursos virtuales. Y a los profesores que se interesan en mejorar su perfil profesional les ayudamos financiar los cursos que se dirigen a títulos reconocidos oficiales como el CELTA.


Evidentemente, si damos tanta importancia a la formación, es que creemos en algún tipo de orden en al aula, aunque no pertenezca a un método milagroso. A este respecto, distinguimos entre un método – que establece los pasos que el profesor debe seguir en todo momento – y la metodología – una orientación general con sus respectivos principios y técnicas. La metodología que seguimos en Hello es la que ha predominado en el ámbito de la enseñanza del inglés como lengua extranjera durante los últimos cuatro décadas: la comunicativa, donde, resumiendo, se aprende el idioma usándolo y se atiende a su gramática en función de lo que uno quiere comunicar.
En los cursos infantiles este enfoque comunicativo es mayoritariamente hacia la comprensión del habla en contextos significativos para los alumnos, las canciones, los juegos, los cuentos y – lo más auténticamente comunicativo – las instrucciones de clase. A medida que avanzan los cursos, se introduce cada vez más la producción oral a través de juegos interactivos, actividades de pregunta y respuesta, actuaciones teatrales y otras técnicas. Cada profesor tiene sus preferencias y cada clase tiene su propia dinámica. Aunque la forma de trabajar puede variar, el objetivo es el mismo, el de optimizar el uso de inglés.
La orientación comunicativa se refleja en todos los aspectos. Por ejemplo, las sillas siempre están distribuidas en forma de ‘U’ para fomentar el intercambio entre todos los miembros de clase, que luego puede tomar varias configuraciones según el tipo de actividad: todos los miembros, pequeños grupos o parejas.
Por otra parte, el marco comunicativo opera como guía en el planteamiento de toda actividad. Un buen ejemplo se trata del procedimiento respeto a una actividad de comprensión auditiva, en inglés un ‘listening’. Un ‘listening’ comunicativo se trata de entender los elementos claves del mensaje. Ahora bien, en la vida real son pocas las veces que escuchamos algo sin tener ni idea de lo que se trata, y entonces el primer paso en el ‘protocolo’ de un ‘listening’ es preparar a los alumnos para lo que van a escuchar, explicando el contexto e invitándoles a predecir el contenido. Al igual, es importante que sea una prueba de comprensión y no de memoria, por lo cual las preguntas se leen antes de escuchar, y las mantiene al alcance durante la reproducción de la grabación.
